jueves, 29 de mayo de 2008

Yo qué sé... Pues ventanas.. Una vez más

Una de cine; De profundis.

Maravillosa película hecha a base de pinturas al óleo animadas, con una impresionante voz en off narrando poesí y una música embaucadora. Muy buen trabajo del gallego Miguelanxo Prado. Sublime.

Una de arquitectura; Wright.

Dentro de un año se cumple medio siglo de la muerte de este icono e hito de la arquitectura. Se mayor logro, a mi entender, fue construir el Imperial Hotel aplicando lo nunca antes hecho, una base como de barro para repeler lo máximo posible los terremotos. Y vaya si lo consiguió. En el terremoto de 1923 fue el único edificio de la ciudad que se conservó intacto, aunque en la década de los 60 fuera demolido en casi su totalidad.

Me gustaría hablar de la arquitectura orgánica, de las tres etapas de este singular hombre (sobre todo de la segunda, que fue terriblemente oscura debido a la muerte de su mujer/antes amante y sus hijos en un incendio provocado de forma intencionada) o incluso de alguna de sus obras, pero me da pereza.

Reflexiono:

A veces me pregunto para qué cojones escribo en un blog si luego me da pereza. La vida es rara, como diría Vila-Matas.

Sigo escupiendo:

Una de bandas; recupero, en mi querido blog, esa canción (y por efecto-causa, esa banda que perteneció al indefinible movimiento new wave) que me tocó la patata (no sé muy bien por qué) al terminar de ver Chicos Monsters. Talking heads.

Una de libros; me encanta Firmin. Es... Tan...

¿Pretencioso?

Je.

martes, 27 de mayo de 2008

Mónica Bellucci

No me preguntéis ni cómo ni por qué acabé en la web de la marca de ropa interior Intimissimi y ahí mismo, colgado en un rincón de la web, estaba un cortometraje protagonizado por esta pedazo de... Actriz.

No sé muy bien qué decir del corto (me ha recordado a la película protagonizada por Jet Li... No, no, no! Claro que no tienen nada que ver... Tampoco hace falta que me lo digáis. Je.) aparte de recomendárselo a fans de Monica Bellucci...

Ah! Sí... Que el director es Muccino, sí.. El de El último beso... No, no ese último beso.

En fin... Que nuestra amiga italiana sale muy guapetona con sus modelitos de Intimissimi.

Para qué decir más.

Por cierto... Qué gran marca, ¿no?

lunes, 26 de mayo de 2008

Maggot Brain

Bajo el embrujo místico de esta canción, escribo este nuevo y enigmático artículo.

Me gustaría hablar de películas actuales. Dejar de lado los convencionalismos (como mi dice mi mejor amigo misántropo) y criticar lo de rabiosa actualidad. Pero en cine... A ver... Sí. Están en crisis imaginativa. O guionista. O vaya usté a saber...

Me gustaría hablar de Indy. De la última de Lumet. Me gustaría hablar de Iron Man. De La antena. Me gustaría hablar (bueno, rectifico... Escribir) de muuuuuuchas pelis actuales. Pero no. Como mucho citaré una frase explícita de cada una de ellas. Porque para escribir sobre ellas ya están mis compañeros bloggeros de los que tienen sus links ahí a la derecha. Pero me lanzo a la piscina con frases explícitas y concisas. Para que vean que uno se moja. Muy poquitín... Pero oye.. Algo es algo.

Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal; se han flipado de manera sobrenatural. Y no se dejen engañar por fans incondicionales de este personaje, sus opiniones serán absolutamente subjetivas. Eso sí, creo que entretenida es un rato. Y el doblaje de Shia me ha parecido magnífico (ya hablaré del doblaje en otro artículo, porque aquel snob-gafapastoso que se autodenomine cinéfilo y vaya dándoselas de cultureta de la nouvelle vague o cualquier otro movimiento cultural ligado al cine y sólo hable o se maneje únicamente en castellano y tenga el valor de decir que prefiere las pelis en versión original, le realizaré finos cortes con una hoja DIN-A4 entre sus dedos hasta que llore sangre).

Iron Man; la mejor adaptación de un héroe Marvel.

Antes que el diablo sepa que has muerto; no la he visto y he leído muchas críticas negativas, pero me gustará sólo y únicamente porque sale la maravillosa Marisa Tomei (sigo sin entender por qué razón Seymour Hoffman y Hawke son hermanos. No pegan ni con mazapán glaseado).

En fin.. Podría tirarme así toda la mañana. Una película tras otra. Pero llegados a este último título, lo que realmente quería era escribir sobre una película rodada por su director.

Network.

Ni Serpico, ni Doce hombres sin piedad, ni Tarde de perros, ni ninguno de sus archiconocidos trabajos. Quiero hablar de Network, sólo de Network.

Menudo peliculón, señores.

Ya está.

Ejem

Y ahora, cambiando de tema, me gustaría hacer un par de recomendaciones. En el mismo plan que el artículo anterior (prometo no seguir con esta temática, que ya va siendo hora de hablar sobre algún librico o algo... No sé, por hacer esto algo variado).

Bueno, la primera recomendación sería El topo, película mejicana de una realización pésima (por falta de presupuesto) y una narración torpe pero con una simbología llena de extraños significados y múltiples interpretaciones; desde el mundo del tarot al mundo del budismo pasando por la filosofía más oculta y profunda del mundo oriental, sin dejar de lado la serie B, a los freak-shows (véase el guiño que hace el director a la película Freaks, la parada de los monstruos, de Tod Browning) y al propio Buñuel. En una segunda parte, aún sin realizar, participará Marylin Manson como actor. El realizador de dicha cinta es el polifacético Jodorowsky. Ojo! Is not a güestern.

La última recomendación es La planète sauvage. Maravillosa cinta francesa de ciencia ficción.

Creo recordar, gracias a un colega, que el cantante de los desaparecidos At the Drive-in llevaba tatuado el símbolo de la película. Naaa.. Era la excusa pa meter esta canción que me mola del grupo. Aunque le podéis ver el tatu en su antebrazo izquierdo con ojo avizor. Juas.

Ahí tienen unas cuantas ventanas abiertas. Pasen, disfruten y descubran por sí solos. Que yo no estoy para hacer críticas elaboradas. Me gusta más romper cerrojos. Jos. Y perder el tiempo en coñac y tabaco.

viernes, 23 de mayo de 2008

Walkabout

Dedico este artículo, antes de nada, a mi incrédulo compañero de películas Kasker, el cual dice que siempre me invento los títulos (Walkabout, Stroszek, El precio de la leche, etc., etc., etc... Si yo sé que tú pilotas más de cine que yo, pero no olvides que colecciono perlitas y frikadas, de calidad, eso sí, pero frikadas que poca gente conoce. Qué le voy a hacer.)

No voy a decir mucho sobre la película, entre otras cosas, porque la vi hace años y no recuerdo demasiado. Recuerdo, eso sí, la sensación de estar viendo una película que no sabía muy bien qué era. Recuerdo, también, que comencé a verla ya empezada y tuve la sensación de que era un documental. Pero aparecían dos niños. No... No puede ser un documental presentado por dos mindunguis, me dije yo con mi orgullo infantil malamente herido...
Una vez me adentré en el documental, apareció un aborígen de la más recóndita Australia y comencé a presenciar aventuras y una trama argumental, cuanto menos, curiosa. Después, todo se volvió una especie de dramón romántico y tal y pascual y don simón.
Pero me quedo con el argumento (suicidio de padre incluido que no pude disfrutar por avenencias del destino televisivo con mi solitaria vida) y la fotografía.


Debo recordar a mis múltiples lectores (juas),

que la vi hace muchos años, es decir, si la vuelvo a ver lo mismo me parece la peor de todas las películas del mundo mundial. Y universal. E interespacial.
Así que no respondo a posibles quejas.

Y ya que estoy con pelis australes, recomendar esa otra de la cual se conoce bien poco. O eso me demostraron el otro día. Je. El precio de la leche.

Una especie de drama-comedia-melancólicacríticasocial-bodrio/a/ratos/entretenida/a/otros.

Y ya que estamos de perlitas y de films raros o extravagantes, voy a recomendar dos más. Porque hoy estoy espléndido y no tengo nada mejor que hacer.

La primera de las últimas recomendaciones (coff, coffffffff) es Holocausto samurai. Agüíta con la película. Os ubico; imaginaos una distopía en la que Rusia gana a USA (ya os veo a muchos de vosotros) a base de bombazos. La única zona de los gringos que queda sin conquistar es Las Vegas y su rey es Elvis. Ole.

40 añazos más tarde muere el rey y todos los guitarristas del país.. No... Del mundo... No, no, no.. Del... Bueno, todos los guitarristas rockeros se movilizan hacia Las Vegas con ansias de poder para reinar dicha reminiscencia americana. ¿Lo mejor? La música. ¿Lo peor? Pfff... (¿Se entenderán las onomatopeyas en los blogs?)

La segunda y la última de las últimas recomendaciones es Trouble Everyday. A mí me moló. Pero yo soy un raro. Tiene un toque gore curiosete, pero no os asustéis. No es rollo Peter Jackson en sus años mozos. Es una peli... Seria... Con.. Sangre. O algo así.

miércoles, 21 de mayo de 2008

Días extraños

Ayer odié a todo el mundo. Pensé en escribirlo aquí y dejar constancia de lo mucho que os odio, pero me di cuenta que empezaría a utilizar el blog como un diario. Hoy, al calor de una copa de brandy, tranquilamente, me planteo con seguridad el hecho irrefutable (e inevitable) de dejar constancia de la vida personal en un blog.

Odié tanto a todo el mundo que, de una manera casi surrealista e incoherente, relacioné el artículo de Kraven sobre Iron Man con el personaje de Lobo del sello DC Comics.

Ya. No hay relación alguna. El nexo se produce cuando mi odio al mundo fluye estrepitosamente por mis venas y mi cerebro.

Lobo es un personaje carismático, el primer personaje con toques afro-extraterrestre-rastafari-molo-un-puñao con un carisma acojonante y aplastante. Me extraña mucho su poco éxito en el mundo del tebeo (me refiero, claro está, tanto en el mundo marvel como DC, es decir, esa fama que tienen Batman o Superman, ambos de DC y Spiderman o Daredevil de Marvel). No me gusta suponer que es debido a que pertenezca a DC y no a Marvel.

En fin.. Hacía tiempo que pensaba cómo sería una adaptación a la gran pantalla de este personaje, pero gracias a Zeus, esas ideas desaparecieron ayer.

No se puede hacer una versión de ese personaje. No es un súper-héroe (para nada). Y además... Sería romper toda su magia y encanto. Todo ese carisma que irradia cuando utiliza su violencia contra el universo, cuando canaliza todo su odio en destrozar bares interespaciales o romper cuellos y cabezas sin piedad alguna y sin motivo alguno.

Además, ¿quién cojones podría hacer de Lobo en el cine? Mmmm... ¿Bardem?

Un poquito de barba, unas rastas monas y ¡hale! Lobo meid in espein. Con grito incluido. Y no, no creo que el hermano mayor de Mickey Walsh pudiera hacer de Wolverine.

Existe por ahí un cortometraje de un especial que salió del cómic (en youtube está en dos partes) en el que Lobo debe matar a Santa Claus. En el corto Lobo es bastante... Blandengue...

Ah! Sí... El título de mi artículo... Ya, ya... Días extraños.... Y vosotros diréis; ¿pero qué narices tendrá que ver? Pues la verdad es que no tengo ni idea... ¿Coincidencias lingüísticas?... No sé... Pero es gracioso ver en una peli gringa la bandera de Asturias y la palabra Madrid bien escrita en la pantalla donde sale dicha bandera astur. Je.

martes, 20 de mayo de 2008

Las propiedades del cristal

AMOR CONVENCIONAL

No voy a cambiar el cielo por tu falda,

ni pienso acomodarme en el cojín

caliente y mullido de tus pechos.

Tampoco tus palabras servirán

para enterrarme en el consuelo

de un amor tibio y convencional.

Quiero sembrar mi fatiga en tu cuerpo,

pisarte los labios y no dejar de andar

hasta que el tiempo se nos someta.

Llegar a ti sólo ha sido empezar camino;

tu ombligo no es mi hogar sino el lugar

donde se esconde el sol que persigo.

Sergio Rodríguez

martes, 13 de mayo de 2008

El ¿imprescindible? descenso a los infiernos

Últimamente, de manera fantasmagórica a la vez que sensual, merodea por mi mundo la idea del descenso a los infiernos.

Dicho descenso implica múltiples acepciones, conjuros, mitificaciones orgiásticas y un eterno etcétera en el que sólo hay cabida para la duda.

Son múltiples los artistas que han descendido a la morada de Lucifer y luego han despegado como la espuma hasta el estrellato o la fama. Parece que venden su alma. Je.

Pero los que a mí me interesan son aquellos que han bajado a lo más profundo de las entrañas de la tierra, donde se han regodeado con el lodo, y por una u otra causa han perecido en el camino llegando, muchas veces, a suicidarse.

¿Cuáles son los motivos para que Ian Curtis se ahorcara? ¿Cuál era su infierno? Y más allá de eso, ¿el suicidio siempre tiene que ir ligado a ese descenso infernal o dicho viaje místico tiene que ir ligado al suicidio?

Es cierto que muchas veces ese descenso implica un refuerzo en la obra del artista o en su vida personal. Y si no, que se lo digan a Chuck Palahniuk (el cual tuvo que trabajar, entre otros trabajos, como mecánico de camiones teniendo en su [requerido por esta sociedad hasta la saciedad] curriculum vitae una licenciatura en periodismo), Mica P. Hinson (con una adolescencia y pasado propia del mayor yonki delincuente del barrio) o Johnny Ramone (delincuente en potencia en su juventud).

En el cine también han reflejado dichos descensos, viajes místicos en los que el protagonista ha vislumbrado el camino a la gloria. Nacido el 4 de julio refleja ese viaje y la rápida subida al mismo trono de la gloria. Es curioso, ya que en el cine, nos muestran ese descenso y el súbito ascenso de la manera más evidente y simple que podamos llegar a pensar, pero en otras ocasiones, como en El almuerzo desnudo, La escalera de Jacob o Johnny cogió su fusil, los infiernos son eternos, aunque no una condición relevante e imprescindible para el suicidio. Al menos en el argumento, claro...

También la literatura está plagada de casos en los que el escritor o la escritora han creado verdaderas obras de arte, novelas que se consideran joyas de la literatura, que no han sido reconocidas y dichos autores se han visto envueltos en los más oscuros paraderos de la mente humana. Toole (duele saber que has escrito una obra inmejorable y que la rechacen constantemente allí donde la presentes), Burroughs (la generación Beat merece un artículo aparte), Bukowski (infierno del que nunca salió) o el recientemente decubierto gracias a un amigo, Tristan Egolf.

En la música también el abanico es múltiple; (¿quizá, tenga que ver, el coqueteo continuo e infinito con las drogas siempre ligadas a la música?) Jim Morrison, Kurt Cobain, Jimmy Hendrix, Janis Joplin y los menos conocidos pero igual de buenos o mejores, Mark Sandman (no se suicidó de forma voluntaria, pero su personal e íntimo infierno fue atroz, donde las drogas recetadas fueron el pan suyo de cada día), Nick Drake (del cual, mi colega Kasker, publicó un artículo hace poco) o Jeff Buckley.

Muchos de estos viajes están rodeados de misterios, teorías, documentales y demás parafernalia. A mí, lo que realmente me interesa, es el dilema de los proscritos al propio infierno, esas personas (en concreto los artistas, ya sean escritores, músicos, actores, etc.) que renacen cual ave fénix y surge su obra como si de la nada apareciera. Y, cómo no, también esos otros artistas que se sumergen en las brasas de la soledad y la amargura para escapar de esa espiral con pólvora, fármacos o cuerdas atadas en forma de soga.

Queridos lectores, una vez más, este solitario con pipa y copa de coñac os abre una ventana. Una de miles. Pasen y descubran, por sí solos, el resto de la casa.

lunes, 5 de mayo de 2008

La vuelta a la tortilla. O al mundo.

Hace unos años (y décadas), era bastante normal encontrar directores de cine que surgían después de una extensa carrera tanto en publicidad como en videoclips de cantantes o grupos de música, los cuales, compaginaron con sus proyectos cinematográficos, dejando a un lado, casi obsoleto, al cortometraje.

Ejemplos claros y famosos son los de Spike Jonze (director de videoclips musicales que posteriormente realizó la más que interesante película "Cómo ser John Malkovich") o Michel Gondry (gran realizador de spots publicitarios, videoclips y en los últimos años de películas como "Olvídate de mí" o la más reciente "Rebobine, por favor").

Otros realizadores, como Chris Cunningham, (reconocidísimo director de spots) se quedan "atrapados" en ese pequeño mundo con infinidad de proyectos fallidos, por una u otra causa, para el cine.

A día de hoy, existen directores de cine consagrados que continúan con sus esporádicos (pero contundentes) coqueteos con la publicidad. Tal es el caso de David Lynch para Gucci o Guy Ritchie para Nike.

El mundo del cortometraje es más austero. Menos reconocido. Menos famoso, cuando en una teoría casi de libro, debería ser una antesala para entrar por la puerta grande. Pero, en ocasiones, aparecen cortos más mágicos, extraños, entrañables o freaks que el propio mundo del cine, videoclips o publicidad. ¿Un ejemplo? ¿Cansados de tanta saga con Batman ("The dark kngiht" se estrenará este mismo año)? Pues matemos a Mister Wayne pinchando aquí (la escena de la capa en el suelo es maravillosa). ¿Otro ejemplo? Vale... Pero ahora uno de animación: "Sr. Trapo".

La vida es rara. Uno se hincha a realizar cortometrajes y puede que no vea nunca un plató de cine para una gran producción. No es que realizando videoclips o spots publicitarios sea más fácil, pero parece ser que, por suerte o por desgracia, tiene más caché.

¿Cuestión de pasta? ¿Contactos? ¿Proyección internacional? ¿Quizá, cuando uno se ha consagrado, ya no puede realizar más cortos pero sí spots o videoclips? ¿Cuál es la diferencia? ¿Cuestión de pasta? ¿Contactos?.............. No sé, al fin y al cabo, todos cuentan una historia.

¿No?